Gästanvändare
31 januari 2023
El hotel classic Begur no tiene una recepción decente. Ni un ascensor, es un montacargas. La habitación 1920 huele mal, por las cañerías, el baño, feo. Desayuno pobre. Spa, bueno, un zulo. La cama, grande. Es para parejas muy enamoradas que quizá no se fijan en las deficiencias del establecimiento, porque "el amor" no les hace ver las humedades, los malos olores, lo cutre y lo cursi a precio de oro.
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