La Re'Belle

Siento poner una reseña tan negativa pero la mala experiencia vivida en este espacio lo merece. Solo de llegar nos encontramos con la propietaria de la casa con la que, por problemas de idioma, no podíamos comunicarnos correctamente y ella nos quería explicar que si cancelamos la reserva de Booking la habitación nos salía 7 euros más barata. Al ver que no nos entendíamos, optó por gesticular con la aplicación de Booking y ella por su propia iniciativa usó uno de nuestros teléfonos para cancelar dicha reserva y confirmar la cancelación desde el suyo y, acto seguido, procedió a irse a por un papel con su número bancario. Todo paso muy rápido y no supimos ni como actuar pero nos resultó algo muy incomodo y de desconfianza. Al volver la mujer con el papel le dijimos que queríamos nuestra reserva con Booking porque nos garantizaba más seguridad. A todo esto la mujer nos hizo hacerle la transferencia de 67 euros y nuestra reserva de Booking nunca ha vuelto a aparecer, así que empezamos por el robo de 7 euros. A todo esto ella comentaba que por supuesto había tramitado el error con Booking, pero han pasado días y no ha sido así. El resto de 60 euros que cuesta la habitación podríamos decir que es el segundo robo... Una habitación con un cubre cama que tenía mala olor, el aspecto de la habitación dejaba muchísimo que desear, todo el mobiliario y decoración parecía recogido de la basura, mucha sensación de suciedad. Las toallas del baño, a parte de ser totalmente diferentes (una de ellas era publicidad de regalo de la revista Vogue) olían fatal. El baño no tiene puerta, únicamente una cortina que arrastra por el suelo. Suelo que obviamente al ser de baño y de una habitación de hotel, no estará siempre limpio, y a saber la suciedad que tenía esa cortina... Por último, te venden que la estancia de incluye desayuno, no hay opción de pagar menos por la habitación y no incluirlo. Nos ofrecieron un café de cápsula con un croissant frío y seco, pan y en la mesa unos botes de mermelada usados y a los que les quedaba solo la parte inferior para gastar. Decidimos quedarnos en este hotel por las buenas reseñas que hay en Booking, pero viendo la estrategia de la propietaria ahora entiendo porque no hay más variedad de reseñas. Sitio 0 recomendable y nada bueno a destacar.

Chambre non adaptée pour une personne claustrophobe, piece minuscule avec bac à douche non fermé d’où eau partout, wc isoles par un simple rideau, pas de chauffage dans l’espace studio - piece quasiment dans la rue donc bruit le matin - à déconseiller totalement l’hiver

Malgré que Vanessa soit plutôt sympathique et souriante, quelques points sont quand même à déplorer: Chambre: -literie du deuxième lit absolument affreuse: ressorts apparents, sur les cotés c'est plat mais au milieu il y a une crevasse -draps pas frais -une fenêtre pour tout l'espace (ce n'était pas indiqué sur la description de la chambre) --＞ faut pas être claustrophobe Salle de bain (un vrai fiasco) : - pas de porte: il n'y a juste qu'un rideau qui sépare la salle de bain de la chambre -la douche n'est pas équipée d'une séparation --＞ résultat on met de l'eau partout -le savon proposé dans la douche pourrait s'apparenter à un champoing mais ce n'est en réalité que le savon pour main de chez Lidl lait et miel --＞ c'est honteux, les étrangers pourront se faire avoir en se lavant avec alors que ce n'est pas du tout adapter Espace partagé avec l'autre chambre (Cuisine + Salle à manger) : on n'étaient pas prévenus qu'on allait partagé un espace -tasses proposées rafistolées en mille : anses brisées réparées laborieusement avec de la glue -minuscule frigo à partager : faut pas avoir beaucoup de frais - salle à manger encombrée par une beaucoup de livres poussiéreux, un matelas pour bébé qui est en train de pourrir sur le côté En Conclusion: chambre à fuir mais la ville vaut quand même le détour