Hospedium Hotel Don Fidel

After staying here last year and having a good stop, This year totally different, the accommodation was good and clean , But they do not serve any Food at all on Friday/Saturday /Sunday nights. After a very long journey when enquiring about food they suggested the local bowling alley, We were also booked in for our return trip, but has now been cancelled. Worst of all was told Breakfast was at 7am but at weekends not served until 8am so we went without food for 24 hours. Be Warned.

This is the worse place I’ve ever stopped , do t be fooled by photos , rooms very worn and cold, wasn’t able to eat in the restaurant told we had to eat in the bar with a load of men who had just finished work, menu out of all 5 starter options only 1 available boiled potatoes and beans, and out of 5 mai s only 1 available boiled potatoes and chicken. Slap bang in middle of an industrial park with nowhere to go so site lied again ,wouldn’t let children play in park as very dirty

Don't be put off by the surroundings when you arrive as the hotel is in the middle of a trading estate BUT hotel and restaurant modern and clean. Plus, as on the outskirts of Zaragoza it's an ideal stopover as access to the motorway is easy. Good simple food and drinks at reasonable prices. Dog friendly which is hard to find. When the Reception is not manned the automatic check-in can be a pain but the staff in the restaurant are more than happy to help you.

El recepcionista es un poco peculiar, pero muy majo y gracioso. Tenía un aire con Emilio de ANHQV. Las habitaciones son correctas y limpias, con aire acondicionado y televisión por cable. Tiene dispensador de jabón tanto para la ducha como para el lavabo. Para el desayuno las napolitanas y los cruasanes eran muy ricos, pero el café sabía a pies de mono, malísimo... El hotel tiene a rasgos generales muy buena calidad/precio, la única pega es que su ubicación está en un polígono apartado de todo, el lugar podría salir perfectamente en las noticias por haber habido algún delito...

Solo puedo opinar del servicio del restaurante. Viernes, a las 17.10 me dicen q no sirven cafés ni nada. Que están cerrados y tienen la caja cerrada. Éramos 3. Pero más tarde un chico sale a la terraza con una coca cola.

Si las fotos se pudieran oler, jamás habría reservado en este hotel. Nada más entrar a la habitación, una fuerte peste a tuberías atascadas en el baño nos dio la bienvenida. En seguida llamamos para hacer un cambio de habitación pues era imposible dormir allí (en recepción no hay nadie, tienes que hacer el checking en una máquina) y no nos cogieron el teléfono hasta un buen rato después. La persona que nos atendió no pudo hacer gran cosa, y gracias a Dios había un chico del restaurante (que se estaba ya yendo a su casa), que pudo darnos la llave de otra habitación, sino damos con este chico, ajo y agua porque al otro lado del teléfono nadie se hacía responsable. La otra habitación estaba bastante mejor, sin olores, con mantas y almohadas extra (la otra no tenía). Las habitaciones son de un tamaño decente. El personal que encontramos en el hotel, sobre todo la mujer dedicada a la limpieza, fueron amables. La comida del restaurante estaba buena pero para ser un restaurante de carretera tienen precios muy elevados. Positivo también que haya parking. Por la tarde es imposible descansar porque las paredes son de papel y se oye todo lo que hacen en las habitaciones de al lado. Las cortinas tampoco ayudan, y por la noche hay un foco encendido apuntando a las ventanas del hotel por lo que nunca se oscurece y parece que estás de día todo el tiempo. El baño no tiene calefacción, está helado, imposible ducharse sin coger una pulmonía. Sabíamos que era un hotel dos estrellas pero me parece demasiado caro para lo que ofrece, por ese precio hemos estado en hoteles de carretera mucho mejor.