Hotel Unzaga Plaza

He estado en una estancia de un circuito con el Imserso, es un hotel muy bien ubicado. Las habitaciones necesitan ir remodelando algunos aspectos, pero amplias y la cama muy cómoda, la limpieza perfecta, así como el cambio de toallas, el personal amable, la comida, sencilla, pero bien de cantidad y muy bien elaborada.

Hemos estado 6 días. El hotel necesita una reforma total. La habitacion era sencilla, el baño tercermundista, griferia de los años cuarenta, la cisterna estropeada. De agradecer las toallas eran buenas. El personal de la limpieza y camareras de habitaciones, hacen milagros con lo viejo que está el hotel, por ese lado no hay queja. La comida escasa y repetitiva, de 6 días comimos pollo 4 días. Aunque estaba bien cocinado. Postres malos y fruta escasa. Se salvaban los desayunos. Todo el personal muy amable y atentos.

Hotel en Eibar muy recomendable, limpieza, organización y atención de 10. Por ponerle algún defecto, el desayuno. Poca variedad. El desayuno un 5 justo. La relación calidad precio de las habitaciones, correcta. Y el trato desde q llegamos, inmejorable! Para repetir

Este hotel lo único bueno que tiene es la ubicación, ya que está en el centro de la ciudad. Nada más entrar te encuentras con una sala común que no sabes de que color son los sillones, mugrientos y falta de limpieza, las habitaciones pequeñas y mal distribuidas, el cuarto de baño (por llamarlo de algún modo) estrecho ,retrete detrás de la puerta y encajonado, no puedes casi moverte. Desayuno la mínima expresión, menos no podían poner, en las comidas agua de grifo( usan una máquina para enfriarla) , la comida muy mala , de baja calidad y mal cocinada,,( ni para los cerdos) el personal excepto una o dos personas muy desagradables. Le sobran dos estrellas, nunca pensé que encontraría un alojamiento tan malo como este. Varios días fui a comer a un local cercano porque la comida no sé podía comer.

Hotel céntrico, con casi nulo aparcamiento, hay que buscar garaje privado. Las habitaciones pequeñas, el cuarto de baño pequeño todo. Las camas con los colchones de los que te engullen, la almohadas blandas. La insonorización de la habitación nula, se escuchan los trenes (estación euskotren frente a hotel) y los ruidos de la calle. No tiene aire acondicionado, ni caja fuerte, ni mini nevera en las habitaciones. El desayuno justito y lo mismo todos los días. Fuimos en pensión completa y estuvo variado pero justito. Hay que tener cuidado con los dos ascensores, se cierran muy rápido y te pueden pillar. El personal en general bien.

Malo. La habitación pesima, con vistas a un patio sucio y pequeño. El baño era antiguo total enano, con mini bañera imposible de controlar la temperatura del agua y una cortina de los años 60. No entrabamos los dos. Un taburete para poner las cosas del baño. La comida malisima . No volvere nunca